El Blog-eo

Blog-eo: Dícese de una persona que tiene un bloqueo con un blog. 

Me gustaría bautizar este blog haciendo honor a una verdad que me ocupa: el bloqueo. 

Quien me conoce sabe que escribo cada día. Lo hago por pura necesidad y sin pretensiones. Es el espejo más fiel donde me miro desde hace más de veinticinco años y fue la terapia por excelencia durante mi complicada adolescencia. Escribo nada más despertarme y antes de acostarme. Escribo en la calle, en mi casa, en una cafetería, en un parque y donde me pille. Y es que escribir es el lenguaje y la forma más certera que tiene mi mente de vaciarse y mi espíritu de llenarse. 

Hace ya varios años que la escritura es una de las fuentes de ingresos que recibo en mi vida de autónoma y de artista de economía inestable pero, al menos de momento,  afortunadamente abundante. He escrito guiones para tele, un documental, he escrito teatro y he publicado un libro. Esto es una fortuna, y soy muy consciente. Pero sé que no muestro ni la tercera parte de lo que escribo por un bloqueo que pretendo romper con este acto psico-mágico de honrarlo y de abrirle un espacio en estas líneas. 

Un bloqueo es la creatividad estancada. Puede tomar diversas formas, y dependiendo del arte en cuestión, se manifiesta a su manera. En mi caso, aunque escribo cada día, no sentía que mi contenido fuese interesante para otras personas. Así que llevo años acumulando escritos que pretenden salir poco a poco en este espacio al que espero cuidar como merece. 

Y a continuación te cuento una pequeña anécdota: 

Tuve un blog precioso que me costó bastantes euros en su día. Me costó mucho encontrar un nombre que enganchara, por lo que hice lo que era muy propio de mí en aquella época (y en esta, no nos engañemos): preguntarle a mis amigos. Mi amigo Jose Angel, compañero de caminatas y reflexiones y programador de esta web, me recomendó que lo bautizara como uno de los poemas de mi primer (y hasta el momento único) libro. Eso hice. Le puse «La mirada de mi vecino»; el título de un poema que hablaba de un señor que venía de la guerra.  Y a partir de esta elección, mis admirados diseñadores de esta web, Enrique y Dani (www.perruncho.com)  hicieron ilustraciones que hicieran honor a aquel novelero título. Después de varias pruebas, me enamoré de una donde aparecía yo tomándome un café asomada en un balcón de una casa blanca y azul, simulando que miraba hacia la calle. 

En aquel blog pretendía publicar cada día. O al menos, cada semana. Me informé de todo. Miré la mejor hora para publicar, la peor, me informé sobre cómo monetizar un blog, cómo atraer lectores.. Vamos, que me vi haciéndome millonaria con aquello. Y claro… eran tantas, tantísimas las expectativas, tanta la información, tanto el análisis, que me bloqueé. Y me lo cerraron por desuso y por impago. Y lloré mucho. Y me sentí fatal. Pero aprendí, al menos, a no olvidar jamás de pagar el mantenimiento de la web, porque eso desaparece de un plumazo para siempre y te deja con la sensación de no estar segura si aquello realmente existió o te lo inventaste. El mundo virtual es lo que tiene.  

Y aquí estamos, ocho años después de aquel fatídico despiste, dándole amor a este, mi segundo blog, sin más pretensión que cuidarlo y ser honesta y volcar las no pocas cosas que hago, animada y empujada por alguien que vino a mi vida a inspirarme y a despertarme. Gracias Merilinch. Por esto y por canalizar este brillante título. 

Si me leíste hasta el final, lo valoro enormemente. Sé del déficit de atención que sufrimos. Así que enhorabuena y gracias por la parte que me toca. Te mando un abrazo inmenso desde este lluvioso Madrid y te comparto la estampa que me rodea y la canción que me hace compañía en este Lunes. 
La planta de las gafas se llama Luis y es mi compi amable de piso.

Y si tienes un bloqueo, dale un espacio, escribe sobre él, si es que escribes, o píntalo, si es que pintas, o báilalo, si es que bailas, o haz lo que te dé la gana, pero dale salida. Es lo que quiere y requiere. 

Y si te apetece, cuéntamelo, cuéntanoslo. 

Me encantará leerte. 

Fleje de Love

Compartir en

Share on facebook
Share on google
Share on twitter
Share on linkedin
Share on pinterest
Share on print
Share on email
Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea    Más información
Privacidad